sábado, 23 de febrero de 2008

LITERATURA: ¿Paco Yunque o Harry Potter?

Por Mario Peláez Pérez
¡Los libros, siempre los libros!. Sin duda son ellos los íntimos amigos; los únicos con quienes podemos conversar en las profundidades de la conciencia. Y como diría el poeta Washington Delgado, “amistad a cambio de nada”. Pero el libro no es solamente su sensual anatomía, el libro es lectura, que construye una relación dialógica con el argumento, con los personajes, con las hipótesis, las conclusiones y el paisaje. Entonces también el libro es la imaginación; y luego, cual rayo refractario, es escritura.
Consecuentemente la aventura de leer no es únicamente divertimento para endulzar el día, sino nutriente que mejora la calidad de vida.
Desde luego, hablamos de leer un buen libro. De eso se trata en última instancia, y no del “hábito” de la lectura para leer cualquier lectura, cualquier libro. Pues la lectura es un quehacer intelectual que enseña, compromete, sensibiliza: mejora el proceso de humanización. Mucho más necesario en los tiempos del pragmatismo de placenta neoliberal. No siendo así de poco serviría la lectura.
Ahora bien. La saga literaria.. de Harry Potter integrada por siete libros (“La piedra filosofal”, “La cámara secreta”, “El prisionero de Askaban”, “El cáliz de fuego”, “La orden del Fénix”, “El misterio del príncipe” y “Reliquias de la muerte”) ha desperezando a miles de adolescentes, jóvenes y adultos. Aquí en Lima, también las colas para comprar se semejan a las colas de un clásico de fútbol. Y todo indica que “Harry Potter” y las reliquias de la muerte”, libro que pone fin a la saga, congregará pequeñas multitudes...La Editorial “Océano” y la librería “Crisol”, gerentes del marqueteo de Harry Potter, aseguran que el sábado 23 estarán en el Óvalo Gutiérrez lo más granado de la intelectualidad, también los miembros de los clubs de fans ( “La orden del sol”, “Legado Potter”, y “Vispertooth”), con su inocente historia juvenil, seguramente (continua)
La saga Harry Potter no potencia la imaginación ni permite recrear lo que se va leyendo. La mágia y prestidigitación, tan solo asombran, y entonces bloquea la capacidad dialógica. Porque una cosa es la imaginación, la energía mental que despliega, y otra la fantasía, que no genera preguntas, únicamente fascina.
Para que la imaginación mejor se acompañe con la dialéctica, la historia o argumento o hipótesis o intriga debe tener raíces en el medio social, y mejor si les es familiar al niño o joven que lee. Este no es el caso de la saga Harry Potter. En ella –en los 7 libros-no hay un ápice de parecido con el mundo alegórico, simbólico, cultural y subjetivo andino, criollo, afro y amazónico. Podría argumentarse que “Pinocho” de Carlo Callodi, tampoco tiene estos elementos. Falso. El tema que despliega “Pinocho” es terrenal y universal: las mentiras de un niño travieso. Igual sucede con “Alicia en el país de las maravillas” de Mark Twain o el “Mago de Oz” de Frank Boum.
Como sabemos, el “hábito” de la lectura en el Perú es calamitoso, y más penoso a nivel de niños y jóvenes. Entonces considerar que leyendo los libros sobre la mágia de Harry Potter, el “habito” de la lectura mejorará, es francamente equivocado. En todo caso se desarrollará la afición por el ilusionismo, que no tiene nexos con la vida al seno de la historia. Lo que no significa que en la literatura prevalezca lo social sobre lo artístico; y menos desestimar el mundo de la fantasía. Pero primero debe solventarse el soporte infinito de la imaginación.
Proceso distinto es batallar para que nuestros niños y jóvenes se apasionen por la aventura de leer y traben amistad con personajes como Paco Yunque. Narración del mismo nombre de Cesar Vallejo, que responde a la cosmovisión de un niño (de los millones de niños peruanos) que con el empleo de conjunciones causales encarnadas en el POR QUE trata de comprender el mundo en el que vive y cuestionar sus tristezas...
Usted elige, amigo lector: ¿Paco Yunque o Harry Potter? ¿O acaso los dos? Usted tiene la palabra...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Realmente estoy impresionada; esperaba muchos mas artículos del Dr. Mario Pelaez; de toda índole. Su agudeza en articulos como catedras eran de referencia obligatoria en la Universidad. ¿Tanto se ha circunscrito al ámbito literario provinciano? Ojalá me este equivocando